Gina, la mami rubia y esbelta como una figura egipcia, sufrió el resultado de un humano irresponsable y cruel. Dejó un piso que daba a un patio interior de vecinos, y en el piso dejó también a la gata, una cachorra grandecita, sin esterilizar ni chipar.
Afortunadamente una ventana estaba ligeramente abierta y Gina salió por ahi a buscar comida y agua. Durante meses estuvo mendigando comida a los vecinos, comiendo un dia si y dos no, sobreviviendo al límite. En ese tiempo tuvo hasta dos camadas, nos avisaron cuando tuvo a la segunda, así que en seguida fuimos a recogerla junto a sus peques. Nos costó nada, Gina estaba deseando ser ayudada y casi nos vino a los brazos, es muy confiada y cariñosa y nos dejó recoger a sus peques sin problema.
En una casa de acogida, Gina se ha recuperado por completo de su extrema delgadez y sus peques han crecido sanos y hermosos !! Tenerlos cerca y disfrutar un rato con ellos es un placer al que no querrás renunciar cuando los conozcas. Adopta y ten la suerte de mejorar tu casa, de convertirla en un hogar, el que necesitan estos peques y esta jovencita !!
Gina es una gata confiada y cariñosa, de esas pocas gatas rubias. Es una supermami muy paciente y generosa con los peques y con los humanos. Es una jovencita preciosa y muy observadora, que destaca más por su personalidad que por su gran belleza. Los peques son una delicia de cachorritos, activos, listos y llenos de vida.
Diana, la nena superjuguetona y cazadora
Nival, el nene juguetón